Sinceramente IMPRESIONANTE. La verdad es que Dior iempre me sorprende pero esta vez, en serio, ha sido algo que para nada me esperaba. Me he fijado en que las parcas blancas son un "must have" en toda regla, y los tonos de colores vivos, también los caqui y el azul marino tirando a violáceo. El estampado floral domina los mini-vestidos, que en muchos casos son resaltados con volantes, y las túnica con estilo étnico y como calzado los bonites de tacón alto y las alpargatas, pisando fuerte, como debe ser. Esta firma cada día me sosprende más. He de decir, por ser algo crítica que la ambientación me resulta algo sosa, pero por lo demás, no hay quejas.
Nunca solía salir de casa sin su barra de labios de Lancôme definiendo las líneas de sus labios. Tenía el pelo negro, oscuro y muy brillante, a veces muy liso y otras veces totalmente tirabuzoneado. La mochila del instituto siempre colgada de medio lado, según ella entera le arrugaba la ropa. Su estilo, indefinible. A veces muy "fashion" y otras veces simplemente "rockero". No vestía de marca, a excepción de algún que otro artículo fruto de un capricho paterno. Era distinta, guapa. Sus pestañas afianzaban su mirada oscura, y se podía observar la dureza de su carácter con su sonrisa. Y ante todo, tenía un sueño. El sueño de posar para las mayores casas del mundo de la moda. ¿Imposible? Quien sabe.
" Nunca dejes que nadie te diga que no puedes hacer algo. Ni siquiera yo. Si tienes un sueño, ve por él. La gente que no llega alto te dirá que seas igual que ellas, pero si tienes un sueño, persíguelo, y punto. "
